Este miércoles 24 de julio, mientras Benjamin Netanyahu daba un discurso en el Congreso de los Estados Unidos de América, en Washington, D.C., grupos pro-palestinos se manifestaban enérgicamente junto con organizaciones judías.
El rechazo público al primer ministro Netanyahu por parte de numerosas colectivos y comunidades judías destaca el profundo descontento que su política de guerra ha generado entre amplios sectores de la comunidad judía en los Estados Unidos. Muchos consideran que su estrategia ha fracasado y ha infligido un daño irreparable a la imagen de Israel y de la comunidad judía.
La visita de Netanyahu a Estados Unidos ocurre en un contexto donde la guerra entre Israel y Hamas está a pocos días de entrar en su décimo mes. Casi 40 mil palestinos han perdido la vida, decenas de miles han sido mutilados y heridos, y un millón han sido desplazados, enfrentando la amenaza constante de la hambruna.
¿Cuáles organizaciones judías?
Entre las organizaciones que han rechazado la visita de Netanyahu se encuentran J-Street, Americans for Peace Now y Jewish Voice for Peace. Varios legisladores y senadores, como Bernie Sanders, Jan Schakowsky y Brian Schatz, también se han unido al boicot en protesta. La semana pasada, 230 miembros del personal del Congreso, representando a 122 oficinas demócratas y republicanas, firmaron una carta instando a boicotear el discurso de Netanyahu, superando los 58 legisladores que hicieron lo mismo hace una década. Ayer, miembros de Jewish Voice for Peace protestaron en el Congreso, resultando en más de 300 arrestos.
En su discurso, el líder israelí reiteró la importancia de Israel como aliado clave de Estados Unidos, atacó a los grupos pro-palestinos estadounidenses, acusándolos de ser manipulados por Irán y agradeció al presidente Joe Biden por su apoyo incondicional.
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